Según fuentes consultadas por el periódico Etilaatroz, las mujeres afganas se ven obligadas a acudir en secreto a salones de belleza clandestinos para maquillarse profesionalmente, con el riesgo de ser detenidas por miembros del movimiento radical talibán. Debido a la persecución que llevan a cabo los talibanes contra los propietarios de salones de belleza y peluquerías en el país, muchas mujeres tienen miedo de acudir a ellos incluso en vísperas de su boda.