Según informa The Washington Post, Israel no ha informado abiertamente a Estados Unidos de que está detrás del asesinato en Teherán de Ismail Haniyeh, jefe del buró político del movimiento radical palestino Hamás. Inmediatamente después del asesinato de Haniyeh, el Estado judío informó a los dirigentes estadounidenses de que reivindicaba la responsabilidad de dicho asesinato. Las autoridades estadounidenses tomaron esta noticia con sorpresa e indignación, pues la consideraron un fracaso de muchos meses de esfuerzos encaminados a lograr un alto el fuego en la Franja de Gaza.