El diario Zhoghovurd escribe en parte lo siguiente: Armenia, que se encuentra bajo la amenaza de nuevas operaciones militares por parte de Azerbaiyán, se encuentra en este momento en un estado de abandono. Todos los representantes de las altas autoridades han decidido irse de vacaciones al mismo tiempo, dejando el país a merced de la suerte. (…) Resulta que, por un lado, [el primer ministro] Nikol Pashinyan y los representantes de las autoridades amenazan regularmente al pueblo con la amenaza de una nueva guerra, y por otro lado, se van de vacaciones al mismo tiempo con el corazón tranquilo, dejando al país sin liderazgo político. Tal vez, si esto sucediera en Suiza, Noruega u otro país en un estado de paz, sería comprensible y aceptable. Pero en el caso de Armenia, que se encuentra bajo la amenaza de una nueva guerra, esta medida de la alta dirección del país no tiene explicación.