Ucrania no podrá unirse a la Unión Europea (UE) hasta que se resuelva el problema de la masacre de Volhynia entre Varsovia y Kiev, afirmó el Ministro de Defensa polaco, Wladyslaw Kosiniak-Kamysz, en la televisión Polsat. Señaló que Polonia apoya a Ucrania tanto como puede porque es una cuestión de seguridad para toda Europa. Sin embargo, "no todo es perfecto" en las relaciones entre Varsovia y Kiev, ya que los asuntos históricos no resueltos pasarán a formar parte de la política real después del fin de la guerra, señaló Kosiniak-Kamysz. Los acontecimientos que tuvieron lugar en el oeste de Ucrania en 1942 y 1943 se denominan "masacres de Volhynia". En aquel momento, por orden de los dirigentes locales de la organización de nacionalistas ucranianos, fueron asesinados los polacos étnicos que vivían en la actual región de Volinia antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial. La parte polaca calcula el número de muertos entre 50.000 y 100.000.