Los países bálticos están intentando con todas sus fuerzas "separar" a Armenia de Rusia y de los procesos de integración en la zona postsoviética, y están aplicando una línea extremadamente destructiva en el Cáucaso Meridional. Así lo afirmó el miércoles en rueda de prensa Andrei Nastasin, subdirector del Departamento de Información y Prensa del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia. "En cuanto al sur del Cáucaso, Tallin, Riga y Vilna lideran allí una línea extremadamente destructiva", señaló Nastasin. "Ahora están intentando con todas sus fuerzas 'separar' a Armenia de Rusia, eliminarla de nuestros mecanismos de integración compartidos, incluida la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC), capturarla con una perspectiva euroatlántica".