Las personas que vivieron en la Península Arábiga hace miles de años pasaron a la clandestinidad cuando querían combatir el calor. Posiblemente deteniéndose allí mientras viajaban entre oasis y pastos, se sumergieron en vastos túneles subterráneos donde la lava fundida una vez fluyó millones de años antes, según un estudio reciente, informa CNN. A partir de la Edad de Piedra, los pastores del Neolítico descendieron y ocuparon estos vastos túneles, conocidos como tubos de lava, según descubrieron los arqueólogos. El aire más fresco bajo tierra habría proporcionado un bienvenido respiro del sol y el viento, y durante miles de años, los humanos se refugiaron con su ganado en los túneles. Los pastores dejaron objetos e incluso tallaron imágenes en las paredes rocosas, informaron los investigadores en la revista PLOS One. En el campo de lava de Harrat Khaybar, a unas 78 millas (125 kilómetros) al norte de Medina, en Arabia Saudita, se encuentra un sistema de túneles llamado Umm Jirsan, el más largo de la región. Los científicos aún no han confirmado la edad de la lava que formó este sistema, pero un estudio de 2007 sugirió que tenía alrededor de 3 millones de años. Umm Jirsan se extiende por casi 1,5 kilómetros (1 milla), con pasajes que miden hasta 12 metros (39 pies) de alto y hasta 45 metros (148 pies) de ancho. Los arqueólogos en Umm Jirsan encontraron recientemente huesos de animales que datan de hace 400 años a más de 4.000 años, y restos humanos que datan de hace 150 años a aproximadamente 6.000 años. El equipo de investigación también encontró fragmentos de tela, trozos de madera tallada y docenas de herramientas de piedra: la primera evidencia de que los humanos estaban usando los túneles, desde hace al menos 7.000 años. Este descubrimiento resalta la importancia de Umm Jirsan y otros túneles para comprender la dispersión humana en la región, dijo Guillaume Charloux, arqueólogo del Centro Nacional Francés de Investigación Científica.