

En toda la región de Moscú se ha iniciado una redada masiva de inmigrantes en busca de registros ficticios. Informes del canal de Telegram Mash. Además de los inmigrantes ilegales, la policía busca y procesa a los propietarios de pisos que registran a especialistas extranjeros en sus viviendas. Sin embargo, estos últimos viven en albergues o albergues, pero ciertamente no en los one-shkas donde estaban registrados. Por tales maquinaciones, los propietarios de viviendas pueden enfrentarse a una multa de 100 mil rublos a tres años de prisión. También las empresas gestoras de Moscú y de la región piden a los vecinos de los pisos alquilados que denuncien de forma anónima sobre ciudadanos que puedan haber sido registrados ilegalmente. También se han puesto en tela de juicio los certificados falsos de conocimiento del idioma ruso. El trabajo deberá presentarse al momento de solicitar una patente laboral. En los centros de migración ya se han detectado varios intentos de obtener un permiso de trabajo con la ayuda de certificados falsos.