

Tanto Armenia como Azerbaiyán tienen la responsabilidad de garantizar la protección y preservación del patrimonio cultural de todos los pueblos de la región para el beneficio de todos. Nos tomamos muy en serio los informes sobre la destrucción de sitios religiosos y culturales y apoyamos el trabajo de las organizaciones internacionales que realizan misiones de seguimiento para evaluarlos. Así lo afirmó el ministro británico para Europa, Leo Docherty, durante el debate sobre "Apoyo internacional a los refugiados armenios de Nagorno-Karabaj" en la Cámara de los Comunes del Parlamento británico. Docherty también señaló que Gran Bretaña sigue pidiendo el regreso de todos los prisioneros de guerra y los restos de los muertos en el conflicto. "Nos alegramos de que Armenia y Azerbaiyán acordaran liberar a 34 prisioneros en diciembre pasado", dijo.