

Asustar a la propia población no es la mejor manera de lograr un resultado favorable para Armenia. Maria Zakharova, representante oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia (MAE), afirmó esto en una rueda de prensa el miércoles, y comentó la declaración del primer ministro armenio, Nikol Pashinyan, de que si la parte armenia se niega a discutir cuestiones de delimitación y demarcación fronteriza con Azerbaiyán, entonces la guerra puede comenzar al final de la semana. "Estos asuntos deben resolverse con calma y de manera constructiva, existe un mecanismo para ello: es la comisión de delimitación de fronteras entre Armenia y Azerbaiyán. Nosotros [es decir, Rusia] estamos dispuestos a ayudar en este trabajo, teniendo en cuenta nuestra experiencia. En el marco de esta estructura hay que trabajar sobre la base de los principios antes mencionados", afirmó Zajárova. Según ella, lo que dijo el primer ministro armenio no debería tener ninguna relación con Rusia, y lo decidió únicamente el liderazgo armenio en su comunicación con Occidente. "Me gustaría que sólo quienes toman esas decisiones en Ereván asuman la responsabilidad de los pasos que dieron bajo la influencia de Occidente", dijo Zajárova, señalando que la parte rusa informó sobre esto, incluso a través de canales bilaterales.